CIREN realiza Inventario de erosión para identificar situación actual de suelos en la región del Maule tras graves incendios forestales del año 2017

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  • Estudio incluyó el desarrollo de nuevas técnicas de percepción remota para detectar y delimitar zonas con distintos grados de erosión agregando una valorización económica del estado actual del territorio.

 

Santiago, 2021.- Dentro de las consecuencias del cambio climático en Chile, se encuentran las temporadas de incendios forestales que se han adelantado e intensificado, tal como ocurrió el año 2017, en la región del Maule, donde se vieron cerca de 300.000 hectáreas afectadas.

Los incendios forestales, en especial los de alta intensidad, afectan la fertilidad natural del suelo, reduciendo los servicios ecosistémicos y su biodiversidad, desmejorando el nivel de nutrientes de los alimentos y en consecuencia empobreciendo a la comunidad que se dedica a su cultivo.

Es por ello que el Centro de Información de Recursos Naturales, CIREN con el apoyo de CORFO, realizó un inventario de erosión que incluyó una cuantificación de la pérdida del suelo, abarcando un área que incorporó 29 cuencas hidrográficas de gran interés ecológico y productivo y 11 comunas declaradas bajo emergencia ambiental durante ese período.

“El trabajo que hemos desarrollado, consiste en el análisis cualitativo de los suelos de la región del Maule especialmente considerando los mega incendios del año 2017 que produjeron una enorme erosión. La ejecución de este inventario permitirá que los usuarios y beneficiarios puedan contar con información actualizada, precisa y confiable del estado del recurso suelo y gracias a este diagnóstico, utilizar los instrumentos de incentivos de reparación de suelos degradados que posee el Estado de Chile, para no perder la productividad de sus tierras” explicó Félix Viveros, director ejecutivo de CIREN.

El estudio incluyó el desarrollo de nuevas técnicas de percepción remota para detectar y delimitar zonas con distintos grados de erosión en grandes extensiones de territorio. Trabajo para el cual se utilizaron imágenes satelitales y modelos de elevación de terreno obtenidos mediante un sensor LiDAR, además de capturar datos de vegetación y toma de muestras que son luego procesadas en laboratorios.

“Desde Corfo, junto a CIREN y el Ministerio de Agricultura hemos trabajado coordinadamente en este Bien Público, desarrollando un inventario de erosión de suelos, el cual se convertirá en un insumo clave para la gestión sostenible de nuestros recursos naturales. La actividad agrícola del país requiere de datos que cuantifiquen y determinen el estado degradativo del suelo, permitiendo focalizar las acciones que nos ayuden a mitigar los efectos del cambio climático”, señaló Pablo Terrazas, Vicepresidente Ejecutivo de Corfo.

El estudio para la realización de un inventario de erosión del suelo dejó al descubierto el nivel de degradación que se prolonga hasta la actualidad con zonas donde el proceso se ha ido acentuando dadas las lluvias, vientos, etc…

De las comunas incluidas en el estudio, Constitución y Empedrado fueron las más afectadas por los incendios forestales. Constitución tiene 62% de su superficie quemada con cerca 120.000 ha con algún grado de erosión, mientras que Empedrado, el 92% de su superficie comunal quemada con 54.000 ha con algún grado de erosión.

Pichamán y El Mellico (Constitución), Nirivilo (San Javier) Patacón (Hualañé), Puico (Empedrado) y San Manuel (Cauquenes), son 6 zonas que superan las 5.000 hectáreas con riesgo grave de erosión severa a muy severa. Mientras que, las zonas rurales con mayores superficies degradadas actuales corresponden a Pichamán, El Mellico, Putú y los Pellines (Constitución), Las Garzas y Sauzal (Cauquenes) y Provoste (Empedrado). Estas áreas superan las 20.000 hectáreas con algún grado de erosión del suelo.

“Este inventario marca un hito en el estudio de la erosión del suelo, puesto que además de utilizar tecnología para identificar y delimitar el estado erosivo, incluso bajo el dosel de vegetación, incluye una valorización económica, que en definitiva es una cuantificación o métrica del daño en el suelo” indicó Juan Pablo Flores, Ingeniero Forestal y jefe de proyecto en CIREN.

En cuanto a la valorización económica de la pérdida de suelos, que consiste en valorar monetariamente la perdida de suelos, según el precio de avalúo fiscal reportado por el Servicio de Impuestos Internos (SII), los daños reflejan una pérdida reflejada en términos monetarios de $7.400.000.000 al año a nivel regional.

Toda la información generada en el proyecto, está publicada en una plataforma de libre acceso, donde se pueden conocer los estados erosivos actuales y el riesgo de erosión (RUSLE) de las 29 cuencas del proyecto, con diferentes resoluciones y formatos. http://erosionmaule.ciren.cl o disponible en www.ciren.cl

 

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